A fines de la década del 90, con la proliferación de tomas de terrenos en los sectores de Alto Molle, conlleva a un aumento progresivo en la población y, por ende, la necesidad de centros educativos en recibir a niños y niñas de las familias aledañas al lugar.
Frente a esta necesidad, el establecimiento inicialmente comienza sus actividades el 5 de abril de 1999, bajo autorización de anexo, con el nombre de Colegio “Eleuterio Ramírez”. Ya en el año 2000, se convierte en escuela autónoma, bajo Decreto Cooperador Nº 729, con el nombre provisorio de “Escuela Eleuterio Ramírez II”, dependiente de la Corporación de Desarrollo Social de Iquique. Y en el transcurso del año 2002 se autoriza el cambio de nombre, transformándose en el actual “Colegio Simón Bolívar”.
Para ir en mayor ayuda de las familias en situación de riesgo social, circundantes al colegio, y ofrecer una educación de calidad para los estudiantes, es que el Alcalde Ramón Galleguillos (Alcalde de aquel periodo) presenta un proyecto para la construcción de una moderna escuela, obra que fue entregada a la comunidad educativa el 5 de marzo del 2012, dando inicio a una nueva etapa, ingresando a la Jornada Escolar Completa (JEC). Aunque para el terremoto del 2014, ocurrido en la zona el 1 y 2 de abril, el colegio vuelve a ser mejorado en cuanto a su infraestructura; con inclusión en su modernización, contando con ascensores, estacionamientos para personas en situación de discapacidad e instalaciones y servicios básicos, enfocado en recibir alumnos con capacidades diferentes.
Desde el 2015, se dirigen nuevos lineamientos del Proyecto Educativo Institucional, implementando la Enseñanza Media Humanista Científica, la Educación para Jóvenes Adultos y la Educación Especial, Educación Media Técnico Profesional y Educación Técnica para Adultos, implementados a principios del 2017 y 2018, respectivamente.
Actualmente el Colegio sirve como puente mediador entre las familias de tomas de terreno, respecto de acceder a una educación con valores altamente sociales, en una infraestructura integradora y moderna, con una formación Técnico Profesional orientada hacia el emprendimiento e inserción laboral inclusiva, bajo el alero de profesionales del Programa Integración Escolar, con docentes calificados y asistentes de la educación con alto sentido de compromiso, que atienden a niños, jóvenes y adultos, no tan solo en situación de riesgo social, sino que además, enfocado en la atención de estudiantes con diversidad de necesidades educativas y sociales, con alto índice de vulnerabilidad, que conlleva a la atención de necesidades educativas especiales (NEE), en muchos de sus casos.
El Colegio además fomenta la participación Artística y Deportiva entre sus estudiantes, lo que favorece el desarrollo de la autoestima y autoconcepto saludable, descubrimiento de intereses en el espacio académico, y su relación democrática con otras instituciones.
El mayor porcentaje de las familias atendidas en el colegio corresponde a familias circundantes al sector: La Pampa y la Autoconstrucción, siendo el 35% de ellas de origen extranjero, tales como ciudadanos bolivianos, colombianos, haitianos. Según datos revelados en la última investigación estadística conducida por las Trabajadoras Sociales, del área de Convivencia Escolar del Establecimiento.
JUAN CARLOS PONCE (Prof. Encargado del Área Audiovisual del establecimiento)